Aunque ya existían dinosaurios avianos como el famoso archeopteryx, el iberomesornis era más avanzado y más cercano a las aves actuales, aunque aún se encontraba en transición entre reptil y ave.
El Iberomesornis era del tamaño de un gorrión, y al igual que las aves modernas usaba su cola como timón, tenía tres dedos posicionados hacia delante y uno hacia atrás, y se dice, que es una de las primeras aves arborícolas.
Por su morfología, se cree que este pequeño dinosaurio terópodo era carnívoro, y su alimentación variaba entre insectos, crustáceos, anfibios y pequeños reptiles.
Restos del Iberomesornis han aparecido en las rocas del yacimiento paleontológico de las Hoyas, muy cerca de Cuenca, donde en el cretácico compartía territorio con cocodrilos, tortugas, y peces, ya que han sido encontrados fósiles cerca de lo que fue un lago poco profundo, y también con dinosaurios como iguanodones y pelecanimimus.
Lo cierto es que observando a esta pequeña ave con detenimiento, con su pequeña y corta cola, no es difícil imaginársela volando en bandadas siguiendo a un líder, o avisándose unos a otros cuando vienen lluvias como hacen los mirlos, o simplemente, avisándose de la presencia de un depredador, lanzándose contra este con pequeños y molestos mordiscos.
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Ahora te dejo con un vídeo para que veas el aspecto del Iberomesornis.
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